Les presentamos la extraordinaria música del gran compositor inglés Henry Purcell (1659 – 1695)...
Mucho gente conoció, sin siquiera saberlo, la música de este hombre que presentamos en nuestra columna gracias a la conocidísima película de Stanley Kubrick, “La Naranja M
ecánica”.
La impactante escena inicial presenta una versión electrónica de una
marcha fúnebre para la reina Mary II, fallecida en 1694. La expresividad
de la música de Purcell es realmente digna de mención. Su figura
destaca como uno de los grandes genios del barroco, un compositor que
murió demasiado joven y dejó una obra importantísima que hoy queremos
recordar en nuestra columna. De su obra más conocida para la escena – su
única ópera, en rigor - , escrita probablemente como entretenimiento
para la corte del rey Charles II hacia 1684, presentamos dos números que
muestran claramente el impacto emocional de la música de Purcell. Con
ustedes, la obertura de Dido y Eneas :
Hete aquí uno de los momentos más conmovedores
de la historia de la ópera (así nomás, y con perdón de los fanáticos de
la ópera decimonónica). El lamento de Dido nos muestra
a la protagonista de esta obra maestra en sus últimos momentos antes de
tomar la trágica determinación de quitarse la vida. “Cuando yazca en la
tierra, que mis errores no creen problema en tu pecho. Recuérdame, pero
¡ah! Olvida mi destino” canta Dido, acompañada por un bajo que se
repite una y otra vez para simbolizar el pesar infinito de esta música :
(Por uno de esos misterios de la computación, no permite poner la ventana del video como es habitual)
http://www.youtube.com/watch?v=I28Q4triWNg&feature=plcp
Esperamos que hayan disfrutado del material, ¡hasta la próxima!
No hay comentarios:
Publicar un comentario